Tanto la gammapatía monoclonal de significado incierto (GMSI o MGUS) como el mieloma múltiple indolente (SMM, smoldering multiple myeloma) son estados pre cancerosos relacionados, pero con diferencias clave:
1. Carga tumoral y criterios diagnósticos
MGUS:
Componente monoclonal en sangre bajo (<3 g/dL).
Menos del 10% de células plasmáticas clonales en médula ósea.
Ausencia de daño orgánico (sin CRAB: hipercalcemia, insuficiencia renal, anemia o lesiones óseas).
SMM:
Componente monoclonal mayor (≥3 g/dL) y/o 10–60% de células plasmáticas clonales en médula.
Tampoco hay daño orgánico evidente, pero la carga tumoral es significativamente mayor que en MGUS.
2. Riesgo de progresión
MGUS:
Riesgo bajo: ~1% por año de progresar a mieloma múltiple u otro trastorno linfoproliferativo.
La mayoría de pacientes nunca progresan.
SMM:
Riesgo intermedio/alto: ~10% por año durante los primeros 5 años, luego disminuye algo con el tiempo.
Representa una fase biológicamente más cercana al mieloma activo.
3. Seguimiento y manejo
MGUS:
Generalmente control periódico anual (analíticas básicas, proteinograma, hemograma).
No requiere tratamiento.
SMM:
Controles más estrechos (cada 3–6 meses).
Hay estudios clínicos que exploran iniciar tratamiento precoz en pacientes con alto riesgo, aunque la práctica estándar sigue siendo vigilancia activa hasta que aparecen criterios de mieloma activo.
4. Implicación clínica
MGUS
Se considera más un “marcador de riesgo” que una enfermedad.
SMM
Ya es una “entidad pre-maligna avanzada”, con una biología tumoral más parecida al mieloma múltiple, pero sin las manifestaciones clínicas.
En resumen:
MGUS = señal biológica de un clon pequeño y estable, bajo riesgo.
SMM = estado intermedio, clon más expandido y con riesgo mucho mayor de progresar a mieloma múltiple.
Diferencias conceptuales y clínicas entre GMSI (MGUS) y mieloma múltiple indolente (SMM)
1. Naturaleza conceptual
GMSI (Gammapatía monoclonal de significado incierto):
No se considera una enfermedad, sino un hallazgo de laboratorio.
Se detecta la presencia de una proteína monoclonal en sangre, pero no hay evidencia de daño, ni síntomas, ni criterios de malignidad.
Es una “condición” que indica que existe un clon de células plasmáticas, pero muy limitado.
Mieloma indolente (SMM, smoldering multiple myeloma):
Sí se considera una entidad clínica pre-maligna.
No hay daño orgánico, pero ya existe una carga tumoral significativa que diferencia al paciente de una simple condición de laboratorio.
Está más cerca biológicamente del mieloma múltiple activo.
2. Criterios diagnósticos
GMSI:
Proteína monoclonal < 3 g/dL.
< 10% de células plasmáticas clonales en médula ósea.
Sin daño orgánico ni criterios de mieloma.
SMM:
Proteína monoclonal ≥ 3 g/dL y/o 10–60% de células plasmáticas clonales en médula.
Sin daño orgánico, pero con carga tumoral mayor.
3. Riesgo de progresión
GMSI:
Riesgo bajo, ~1% por año.
SMM:
Riesgo alto, ~10% por año en los primeros 5 años.
4. Manejo clínico
GMSI:
Vigilancia larga y espaciada (normalmente revisiones anuales).
No precisa tratamiento.
SMM:
Vigilancia más estrecha (cada 3–6 meses).
Puede considerarse la inclusión en ensayos clínicos de tratamiento precoz si el riesgo es muy alto.
Reflexión final:
La GMSI no es una enfermedad, sino un hallazgo de laboratorio que señala la existencia de un clon mínimo y generalmente estable.
El SMM sí es un estadio preclínico del mieloma múltiple, con suficiente carga tumoral como para ser considerado una entidad en sí misma, aunque aun sin síntomas ni daño orgánico.